Los siguientes son algunos de los factores que influyen en la elección de cargas eléctricas específicas: (i) Pérdida de cobre (ii) Voltaje (iii) Reactancia síncrona (iv) Pérdidas de carga parásita.
La mayoría de los motores eléctricos están diseñados para funcionar entre el 50 % y el 100 % de la carga nominal. La eficiencia máxima suele estar cerca del 75% de la carga nominal. Por lo tanto, un motor de 10 caballos de fuerza (hp) tiene un rango de carga aceptable de 5 a 10 hp; la eficiencia máxima es de 7,5 hp. La eficiencia de un motor tiende a disminuir drásticamente por debajo del 50% de carga.