La salinidad es la salinidad o cantidad de sal disuelta en un cuerpo de agua, llamada agua salina. Contribuye fuertemente a la conductividad y ayuda a determinar muchos aspectos de la química de las aguas naturales y los procesos biológicos dentro de ellas. La salinidad, junto con la temperatura y la presión, ayuda a regular las características físicas del agua, como la densidad y la capacidad calorífica.
La alta presión del aire ejerce una fuerza sobre los alrededores y da como resultado el movimiento del agua. Por lo tanto, la presión de aire alta sobre un área del mar corresponde a un nivel del mar bajo y, a la inversa, la presión de aire baja (una depresión) da como resultado niveles del mar más altos. Esto se llama efecto barómetro inverso.