Una curva que se utiliza para conectar dos líneas de grado diferentes de vías férreas o carreteras se denomina curva vertical. Dicha curva se introduce para redondear el ángulo y obtener un cambio gradual en la pendiente, de modo que los vehículos que la pasen no experimenten un golpe o una sacudida brusca.
Hay tres tipos principales de curvas verticales: curvas de cresta, curvas de hundimiento y curvas compuestas. Las curvas de cresta se utilizan para la transición de una pendiente descendente a una pendiente ascendente, mientras que las curvas de hundimiento se utilizan para la transición de una pendiente ascendente a una pendiente descendente. Las curvas compuestas son una combinación de curvas de cresta y hundimiento y se utilizan cuando la transición entre grados no es uniforme.